

Secciones
Servicios
Destacamos
María Ramírez
Lunes, 17 de junio 2024, 11:47
Hay un producto que nunca puede faltar en el neceser, especialmente en primavera y en verano: el desodorante. Un cosmético que ayuda a neutralizar los olores y a contener la sudoración incómoda. Su uso no se limita exclusivamente a los momentos posteriores del ejercicio diario o en días en los que el mercurio aumenta, sino que se ha consolidado como un imprescindible de la higiene personal diaria.
Los lineales de las droguerías y supermercados exponen una amplia gama a los consumidores, en función de sus necesidades y preferencias. Para ello, se puede elegir el formato, en roll-on, en crema, en 'stick' o en 'spray'; la fragancia, como los afrutados, florales, dulces o mentolados y la duración de la fórmula. Sin embargo, a la hora de la elección, hay una duda generalizada que dificulta la compra: la diferencia entre desodorante y antitranspirante.
A grandes rasgos, el primero corresponde a un perfume diseñado para aplicarse en las axilas u otras zonas que generen olor corporal. Por ello, están formulados con menos cantidad de alcohol para evitar la irritación. Hay que tener en cuenta que la función de este artículo es tan solo aromatizar y no reducir el sudor. Un cometido que sí realiza el segundo, por lo que acumula sales de aluminio para que taponen la salida de la glándula sudorípara y así poder disminuir la transpiración a medio plazo.
Por lo general, la inmensa mayoría de los antitranspirantes son también desodorantes, ya que se les agrega algún tipo de esencia. No ocurre lo mismo al contrario, debido a que la clave está en el aluminio, un ingrediente que no llevan en su elaboración. Hace unos años, este compuesto generó dudas sobre su relación con el cáncer de mamá. Sin embargo, según indica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), no hay pruebas plausibles de que su uso pueda aumentar el riesgo.
Una cuestión sobre la que también insiste la dermatóloga Ana Molina, que indica que a pesar de que no existe ninguna amenaza de este tipo, sí puede irritar la piel, especialmente las más sensibles. Asimismo, señala que cada producto debe aplicarse en distintas franjas horarias para que cumplan debidamente su función. En el caso del desodorante, deberá emplearse por la mañana, mientras que el antitranspirante deberá utilizarse por la noche.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.